¿Casualidad o diseño?

A veces los que menos pueden entendernos, nos entienden y los que deberían entendernos, no nos entienden. A veces un animal demuestra mucho más que una persona. Saben cuando estás bien, cuando estás mal y si ven que te ahogas en lágrimas, no se cortan, te las quitan. Son atentos, muy atentos, cuando giran su cabeza como para entender lo que estamos diciendo. No hablan nuestro idioma pero son capaces de entender lo que le decimos mediante sentimientos. Dicen que un perro es capaz de saber lo que te pasa. Es un psicólogo mudo. Siempre he dicho que al perro lo único que le falta es el don del habla. Un perro es capaz de compartir tus alegrías, sabe cuando estás alegre, cuando te ríes y curiosamente te ladran como diciendo "yo también quiero saberlo". Sufren cuando tu sufres, te apoyan en todo momento, son nobles y cariñosos. Aprenden muy rápido la lección, si se tropiezan con una piedra, de seguro, no volverán a tropezarse más. Se enfadan si les engañas, entienden de la mentira. Es curioso, porque si a un perro le prometes algo y no lo cumples, si se lo vuelves a prometer avanzan muy poco a poco, y con una pierna preparada para retroceder rápidamente. Es un don, o tal vez que confundimos los términos. Tal vez los animales sean los humanos y los humanos seamos los animales. Entienden tus juegos, sin explicarles nada anteriormente. Tienen el don de la anticipación, saben que vas a hacer antes de que lo hagas. Son amigos verdaderos pues nadie, ni el mejor de los amigos puede llegar a conocerte como lo hará un animal. Son fieles, no esa fidelidad que se cree tener hoy día, una fidelidad que dura desde el día de su nacimiento hasta el día de su muerte. Increíblemente inteligentes, protectores, fuertes, animadores. El curioso reino animal es tan inmenso que podríamos estar hablando de este tema años y al final sacaríamos algo en claro, proteger al reino animal, nos salvará, son nuestro aliados, los que más se parecen a nosotros, y hay miles y miles de especies, tantas especies que se nos escapan, que aun no conocemos. El que creó el universo tuvo que deleitarse en gran manera al formar tal abanico de posibilidades. Se regocijó en gran manera porque al ver tales especies, unas mas raras que otras, otras mas grandes, otras mas pequeñas pero capaces de decir más que una grande. No hay especies iguales, cada una es única. Al ver todo esto ¿todavía creéis que la tierra y todo lo que hay en ella, todo, es producto de la mera casualidad? Observar el mundo animal, observadlo bien pues en sus coloridos, en sus formas, en sus tamaños, en su belleza, en sus rarezas, se hace una imagen de un creador, un creador capaz de darnos un mundo entero y disfrutar de su maravilloso ingenio, de sus obras tan grandiosas. Vosotros mis queridos lectores ¿qué pensáis? ¿Casualidad o diseño?

Fdo. Cuervo Blanco